Ha días que me sé de memoria. Y me sueno a conocido y no hago más que lloverme sobre mojado. Las palabras me suenan gastadas, y se nota que los pensamientos que tengo han pasado ya por demasiadas cabezas y bocas.
Esos dias son como cuando te duchas y sólo puedes ponerte la misma ropa que llevabas antes.
Sin embargo otros días me descubro a cada minuto. Y me sorprendo de un gesto que hago (o de algo que digo), como si alguien me los hubiera dictado susurrandolos a mi oído.
Yo creo que algunas noches me olvido de quien soy y me paso los días siguientes intentando recordarlo. No es tan malo: la verdad es que me gusta hacerlo.
miércoles, mayo 12
Archivo del blog
-
▼
2004
(83)
-
▼
mayo
(26)
- Cinco horas y treinta y cuatro minutos.
- Tengo un casco
- Gente piedra
- Seychelles
- Yo estaba antes
- Y si?
- Maestro de nada
- Predicción meteorológica.
- Icono generacional
- Cerrado por defunción
- Telepromoción
- Idea para un negocio
- Vámonos
- Otro inventario vital más (coladas nocturnas)
- Me sé / Me olvido
- Juguetes
- Máquinas
- Ruidos de fondo
- Vivo
- El crío renacentista
- Garza
- Yo piloto
- Desavenencias
- Troubleshooting
- Vivir Sin Decidir - 13 normas para no tener que pe...
- I'm back
-
▼
mayo
(26)